>

Blogs

Héctor Barbotta

Marbella blog

Turismo de calidad, empleo…

Uno de los lugares comunes que se repiten año tras año en el mundo turístico sostiene que no hay mejor encuesta que permita vaticinar cómo se comportará la temporada alta que la Semana Santa. Una Semana Santa de hoteles llenos es la mejor garantía de que tendremos un verano pletórico; una Semana Santa con agujeros de ocupación y poco gasto adelanta un verano corto y con dificultades. Contra los incrédulos que desconfían de los tópicos debe decirse que se trata de un lugar común que no suele fallar.
De manera que si estamos ante una Semana Santa con ocupaciones históricas, como es el caso, con hoteles llenos y restaurantes y comercios haciendo caja podemos estar en condiciones de adelantar que el verano vendrá bien, que los alojamientos turísticos estarán a rebosar, que en las cuentas de resultados no sólo de los hoteles sino también de los restaurantes, cafeterías y comercios habrá cierta alegría y que se creará empleo temporal, precario y mal pagado.
No será éste el primer año desde que comenzó la crisis en el que el turismo ofrecerá resultados que invitan al optimismo. Los hoteles vuelven a estar llenos, en algunas épocas del año resulta imposible conseguir una habitación y el precio medio retorna a los niveles anteriores a la crisis. Viene más gente y se queda más tiempo. Pero simultáneamente, los hoteles se desprenden de sus trabajadores más veteranos y experimentados, y con mejores condiciones laborales, para contratar jóvenes con menos experiencia, más desesperación por entrar en el mercado laboral y menor peso en la masa salarial. Cuando se decía que en toda crisis hay una oportunidad posiblemente alguien podía estar pensando precisamente en eso. Y las oportunidades, ya se sabe, están para ser aprovechadas
El presidenta de la CEA, Javier González de Lara, atribuyó el pasado lunes en Marbella la falta de impulso del turismo en la creación de empleo de calidad a la estacionalización, a la incertidumbre política y a que todavía no se ha firmado el certificado de defunción de la crisis.
Son tres razones sin duda de gran peso. Pero posiblemente no sea un exceso de pesimismo o de incredulidad preguntarse qué va a pasar cuando la crisis se deje atrás. Por qué van a renunciar los empresarios a un marco de regulación laboral que les resulta tan beneficioso cuando ese certificado de defunción que anhela González de Lara sea finalmente rubricado. Y quizás sea oportuno también lanzar otra pregunta ¿Es posible una oferta de calidad con empleo precario? ¿Estamos condenados al bucle que nos invita año tras año a reconocer que hay que mejorar la oferta turística?

 


No es el único bucle. Todos los años cuando llega la Semana Santa se suscita el debate sobre el estado de las playas y sobre si es oportuno o no dedicar recursos públicos a su regeneración para devolverles la arena que se llevaron los temporales del invierno. Todos los años la misma discusión y el mismo gasto. Alguna vez se harán cuentas para concluir que es más inteligente hacer una inversión seria que impida que la arena se vaya y no volver a aparecer cada año con el camioncito y la grúa.

Temas

Toda la actualidad de Marbella

Sobre el autor

Licenciado en Periodismo por la UMA Máster en Comunicación Política y Empresarial Delegado de SUR en Marbella


marzo 2016
MTWTFSS
 123456
78910111213
14151617181920
21222324252627
28293031