Los bigotes arrasan. Desde hace varios meses este símbolo tan masculino ha vuelto a la carga salpicando todo tipo de prendas, complementos y objetos de decoración aportando un toque divertido y desenfadado al que se han rendido celebrities, fashionistasy bloggers de todo el mundo.  ¿Pero cómo surge este fenómeno? Para muchos, el origen de esta tendencia se remonta a la iniciativa Movember contra el cáncer de próstata y de testículos. Sencillamente, consiste en que los hombres se dejen bigote durante el mes de noviembre de cada año ( la M es por Moustache) como gesto de apoyo a las víctimas de esta enfermedad. Los que se registran en la web y toman la iniciativa de plantarse el bigote pasan a ser Mo Bros o Mo Sistas (en el caso de ellas). Una vez lucido el moustache los seguidores de esta tendencia piden donaciones por sus esfuerzos  colgando sus fotos del antes y el después en las redes sociales. De este modo, no sólo se pretende recaudar fondos para la investigación, sino también concienciar de la importancia del seguimiento y diagnóstico precoz de una patología que suele ser tabú entre ellos. Movember abrió el camino que posteriormente siguieron otros. Así, la campaña lanzada en las redes sociales por Discovery Channel bajo el eslogan Bigotízate, en reivindicación de un ‘Día del Hombre’ contribuyó igualmente al boom de esta moda peluda a la que también se apuntaron en pasarela Carlos Díez y María Escoté usando provocativos mostachos en su desfile para la Mercedes Benz Fashion Week de Madrid.

Las camisetas de la firma Eleven Paris hicieron el resto. Con el sugerente lema de ‘Life is a joke’ (la vida es una broma), la marca francesa consiguió que el bigote se colara entre los imprescindibles del fondo de armario. Sus ingeniosas camisetas ya cuentan con toda una legión de seguidoras entre las que se encuetran, en el caso de nuestro país, Patricia Conde, Sara Carbonero, Mar Saura, Malena Costa o Paula Echevarría. El secreto de su éxito es sencillo: t-shirts básicas ilustradas con sarcásticas imágenes de personajes públicos. Mensajes que invitan a ironizar con respecto a los famosos del momento mediante un simple gesto infantil, colocarles un dedo bajo la nariz a modo de bigote. Celebrities como Angelina Jolie o Will Smith, rostros aristocráticos como Pippa Middleton, grandes nombres de la moda como Kate Moss, Anna Wintour, Karl Lagerfeld o Marc Jacobs, y de la música como Marilyn Manson o Amy Winehouse, personalidades políticas como Obama, iconos del arte como la Gioconda… Nadie está salvo de ser ‘bigotizado’.

El furor por lucir bigote es tal que en Estambul las clínicas de implante de bigotes atraen estos días a muchísimos hombres de distintas partes del mundo. Y es que en algunas culturas el pelo facial es un símbolo de fuerza y virilidad y en Turquía especialmente puede significar muchas otras cosas, desde orientación política a orígen étnico. Aquellos que no pueden tenerlo naturalmente tienen la opción de implantárselo de forma artificial. Ver para creer.

Os dejo con una selección de artículos bigotudos. Una moda que como veis llega ahsta artículos infantiles o cupcakes. ¡Hasta mañana!