Desde que el ser humano tiene uso de razón, controlar el tiempo ha sido uno de los principales objetivos que ha requerido más esfuerzos. Y por eso surgieron los calendarios perpetuos, un objeto que sirve para saber siempre en dónde estás.
En la actualidad, aunque su uso no es tan necesario, puede servirnos para salir de más de un apuro. Por ejemplo, que quieres saber qué día de la semana se casó tu prima Federica en el año 1940, pues lo utilizas. Si por contra quieres saber en qué fecha se marchará tu hijo de casa o te divorciarás… puedes intentarlo.
Este invento primitivo se puede encontrar en Mapas y Compañía, en calle Compañía, una tienda especializada en libros y diferentes objetos de cartografía y navegación. Es un sitio perfecto para tener un detalle con los aficionados al mundo de la mar o de los objetos de decoración antiguos. Este calendario perpetuo, por ejemplo, cuesta 49,90 euros. ¿Os gusta?