Y llegó el día de los malos. El día en que llegaba nuestro elenco más chungo, y con ellos, una de, las secuencias más duras de la película. Y llegó Poga, David Reymonde, Rafa Castillo-Romero y Antonio Zafra. Carmona y El Rubio se ven las caras, y repetir ese encuentro hasta que hemos dado con la tecla no ha sido plato de buen gusto para todos los que estábamos tras la cámara. Pero algo ha quedado claro: El Rubio es un chungo de los grandes. No era fácil ver al Rubio en un tío tan salao como Jose Manuel Poga. Disfruté viéndolo en la genial ‘Grupo 7’ y me divertí mucho con su aparición en ‘El mundo es nuestro’. Jamás hubiera pensado en Poga para ser el kie, pero en una casual busqueda por internet ví una fotografía de él en la que mostraba una actitud kinki total, así que no importaba como se presentara, ya que esa actitud la tenía. Antes de llegar al ensayo el equipo seguía viendo a ese tío salao; después del ensayo, Poga se había ido y se quedaba El Rubio, acojonando al personal. Grande Poga. Y grande Héctor por dar la cara ante él.
Mi reencuentro del día ha sido con Antonio Zafra y con Rafa Castillo-Romero, dos geniales actores malagueños con los que había coincidido en otros trabajos, y con los que estaba frito por volver a coincidir. Hoy ha sido el primer contacto. Esta semana que viene, los disfrutaré más.
Entre tanta dureza hoy, hemos vivido un momento bonito en el rodaje: la tarta sorpresas a Isa, nuestra auxiliar de peluquería y maquillaje que luce 19 primaveras como nadie. Siempre con una sonrisa preciosa y vitalista. De las que animan un set. Qué bonito ver al equipo cantarle el cumpleaños feliz.
La parte chunga: ver que esto no es un corto-largo. Es un largometraje que exige disciplina y el no fallar, ni pinchar para poder cumplir el duro plan de rodaje. Así que a partir de ahora, vamos a por todas, que El Rubio nos ha echado el ojo encima. Y eso no mola.
Buen finde… El lunes, más.
Enrique García