¡Véngase a Alemania, don José!
El grito jubiloso de antaño: “¡Vente a Alemania, Pepe!”, que estuvo detrás de una estampida humana hacia el solar germano en los años 50 y 60 se ha sustituido ahora, en plena hecatombe económica, por otro, que a tenor de quienes lo profieren y de a quienes va dirigido, intenta animar a otro sector […]