
Foto: Objetivo Málaga. Diario SUR
Se presentaron con la pompa que requería el caso ante los medios de comunicación encargados de propulsarlo a los cuatro vientos las Damas Goyescas de Ronda. Un acontecimiento rayano en el rito que cada año, poco después que el verano haca acto de presencia, avisa que el esplendor de la feria septembrina se aproxima. A principios del pasado siglo, las jóvenes de las clases pudientes soñaban con su ` puesta de largo `, un acto social que les servía de presentación oficial en el círculo de la sociedad de su tiempo. Era un evento que anunciaba el paso de niña a mujer, adiós a la edad de la pubertad y bienvenida a la edad adulta, capaz ya de merecer galán y familia independiente. Las niñas de Ronda, creo que en cualquier época, lo que han soñado siempre es con vestir las galas de Dama Goyesca una vez alcanzada la edad conveniente. Es lo que pensarán las quinceañeras rondeñas, puesta ya las mientes en el acontecimiento que cuando apunta el mes de septiembre de cada año revoluciona la ciudad.
¿Pues y el honor de aparecer en un parco principal del famoso coso taurino ante el enfervorizado público que jalea las faenas de los diestros de turno? Sol a raudales, lujuriosas tonalidades cromáticas, sonrisas de famosos acodados en las barreras. Nunca una plaza de toros ofreció tamaña magnitud de elementos capaces de suspender el ánimo y encender la emoción. Tarde espléndida es la que se conjugan dos de los pilares más firmes por los que la Ronda, siempre monumental, es admirada: el arte de la tauromaquia quintaesenciada en la escuela rondeña y la belleza sin cuento de su mujerío.
Las Damas Goyescas – al frente, la presidenta, Milagros Castaños- arropadas por las autoridades locales, lucieron días atrás su palmito, teniendo como fondo los jardines del suntuoso hotel Catolonia Reina Victoria, recién remozado. A la presentación seguirá el nombramiento oficial,acto que se reserva para la primera semana de agosto, cuando Ronda ya se envuelve en el hálito de la feria y se nos antoja que un geniecillo juguetón corretea por calles y plazuelas y busca acomodo en la penumbra que brinda la Alameda, asomada al Tajo, y en los callejones a los que se asoman casas solariegas y palacetes señoriales.
Catalina, Irene, María, Daniela, Claudia, Nuria, Carolina, Carmen, Rocío,Laura y Julia son los nombres a los que responden las beldades que este año lucirán su palmito en una feria como la de Pedro Romero que suscita el interés de media España y convierte a la Ciudad Soñada en un hervidero de celebridades que no quieren estar fuera del foco de atención que el acontecimiento entraña.