Júzcar, pleno empleo
En estos tiempos procelosos que corren en los que encontrar un puesto de trabajo es tarea ímproba por no decir imposible resulta reconfortante saber que en un pueblo de la Serranía de Ronda se pueden contar con los dedos de una sola mano y quizá sobren dedos las personas que no gozan de una ocupación lo suficientemente lucrativa como para servir de sostén a una familia.
A Júzcar, enclavado en el oeste de la provincia malagueña, en las cercanías del Alto Genal , el cual da nombre a un fértil valle, parece que los pitufos le tocaron con su varita mágica en reconocimiento a que las fachadas de las viviendas se tiñeran de azul, que, como se sabe, es el color distintivo de estos divertidos personajes que con sus historietas y películas cautivaron a los niños de medio mundo.
En buena parte debido a ellos, hoy por hoy, trabaja casi todo el pueblo; merced además, que todo hay que decirlo, a las inversiones que vienen realizando tanto la Diputación como la Junta de Andalucía con el propósito de dinamizar la economía local de pueblos malagueños, en este caso en los que se ubican dentro del marco de la Serranía de Ronda. Una economía deficiente y una situación calamitosa que había que concederle la mayor atención.
En Júzcar, su alcalde, David Fernández (PSOE), exulta de puro contento. Pocos pueden alardear de que las poblaciones que rigen no sufran en esta disminuida proporción la lacra del desempleo. Bien es cierto que los habitantes de este pueblo serrano apenas llegan a los 300, pero también lo es que que en demarcaciones vecinas con mayores índices de población la proporción de desocupados resulta mucho mayor.
Ahora que las elecciones municipales se encuentran en efervescencia no hace falta ser un clarividente para pronosticar que el actual primer edil, en el caso de aspirarlo,seguirá ostentando la varo de mando local.
El azul-celeste de los pitufos sigue refulgiendo al sol primaveral del mediodía y creemos que durante mucho tiempo seguirá rutilando en el pueblo para el contento de los lugareños.