Millonadas de votos en el alero
José Becerra
Harán bien los partidos políticos en no menospreciar el caladero de votos que suponen los pensionistas para lograr arribar allí adonde sus ambiciones tienen puesto las miras. Somos diez millones, setentón más, setentón menos, que podemos mover el fiel de la balanza del poder hacia un lado u otro; que no se olvide este detalle los que quieren aposentar sus reales en la Moncloa de aquí a pocos días, o que en esta residencia permanezca quien hoy por hoy la ocupa.
Las proposiciones de los políticos en campaña no podían dar de lado a este asunto que tanto puede influir en su ascenso y permanencia en el poder. El grito unánime no podía ser más estentóreo: se pide( por pedir qur no quede) que las pensiones suban cada año al unísono que lo hace el Indice de Precios al Consumo (IPC, para los amigos).Tampoco es exigir el oro y el moro, sino que se pretende que nuestros escuálidos ingresos por vía estatal se igualen al ascenso del precio del pan, los garbanzos o las legumbres, que son los alimentos, entre otros que podemos permitirnos una millonada pensionistas del país.
¿Qué proponen nuestros políticos al respeto ahora inmersos en la maraña de las elecciones? El PSOE, como no podía ser de otra manera, en su ideario de anular lo que en su día diera por bueno las luminarias del Gobierno de Rajoy, a saber, la atadura al 0,25% que se decretó habida cuenta del déficit creciente de la Seguridad Social, pretende ahora derogar esa ley, exigiendo que la subida que pretende quede negro sobre blanco plasmada en la Constitución.
PP sale al quiebro dando por hecho que se atiendan a las cotas de empleo del país, y por ende, se reafirme el derecho a la salvaguarda de su poder adquisitivo.Ciudadanos se desvincula en parte del IPC que el resto de partidos abraza sin excepción, pero apuesta por las cotizaciones mantenidas de cada uno a lo largo de su vida laboral, y de paso, reivindica e Pacto de Toledo, tan olvidado por tirios y troyanos. Unidas Podemos, además de establecer la vinculación al tan traído y llevado IPC, pide incrementar las pensiones mínimas y las no contributivas y exigiría en el caso de tocar poder un incremento de las pensiones mínimas a partir de 750 euros; y de paso dar un aldabonazo a la conciencia de los trabajadores que superen los 61 años y acrediten 35 años cotizados, suficientes estos para gozar de un buen ganado retiro. VOX, por su parte, aboga por un sistema mixto, en el que entren en juego tanto la pensión estatal como cualesquiera otra individual que con base el ahorro personal venga como suplemento adicional.
Es crucial para los partidos políticos que definan con claridad sus posiciones en esta candente cuestión que a tantos atañe. Que tengan muy presentes que los millones de pensionistas pueden y deben mover el fiel de la balanza del poder hacia un lado u otro merced a sus votos, según la claridad de las exposiciones merced al distinto pelaje de los que ahora concurren a la algazara de las elecciones. Mucho nos jugamos en el empeño quienes peinamos canas, acumulamos años y trabajos sin cuentos sobre nuestras espaldas. Así que no esperen nuestros políticos que los votos que emitamos se depositarán en las urnas alegremente y sin haber sopesado de manera larga y tendida si se se concede a uno u otro partido, que ahora lo esperan como un maná beatífico. Que hagan cuenta que son alrededor de 10 millones los sufragios que van a seguir una u otra dirección, según la conveniencia.
El día 10-N sujetamos el rábano por las hojas, que decimos los malagueños sentenciosos.Unas millonadas de votos está en el alero, y va a depender muy mucho de que lo se nos prometa sin ambages ni subterfugios caigan en beneficio de uno u otro de los partidos ahora en litigio. Ahora somos juez y parte, que no lo echen por su bien en saco roto.
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