Esta temporada ha surgido un club de fútbol base en Málaga cuyo nombre ya nos indica cuales son los valores fundamentales de la entidad.
El Club Espíritu Deportivo nace con un lema: “Otro fútbol base es posible”. Ante la agresividad existente en los campos de fútbol por parte de padres y aficionados, la competitividad exagerada debido a la mercantilización de este deporte y la pérdida de valores, este club apuesta por una formación deportiva, social y de respeto a rivales, colegiados y aficionados.
Sus entrenadores y formadores inculcan a sus jóvenes jugadores además de la formación deportiva, valores fundamentales. En los entrenamientos y antes de los partidos, realizan charlas en las que frases como “el arbitro es nuestro compañero” o, “hay que respetar al contrario”, hacen que los jugadores desarrollen su labor como deportistas pensando sólo en deporte y divertirse.
Del mismo modo los padres de los jugadores están aleccionados y advertidos sobre los valores y condiciones de lo que podríamos denominar el Código Deontológico de este club, donde no está permitido que se produzcan chillidos, insultos ni improperios durante los partidos algo que podría ser lógico, pero que es poco común en los campos de fútbol base.
Un concepto necesario del que esperamos tomen ejemplo todos y cada uno de los clubes ya no de fútbol sino de cualquier deporte, puesto que la agresividad y competitividad a cualquier precio que observamos y denunciamos desde este blog en numerosas ocaciones, hacen flaco favor a nuestro deporte base y sus protagonistas, los jóvenes deportistas.