Anoche se celebraron los premios cinematográficos más importantes del mundo, los Oscar. Una gala, en la que además del cine, la moda está muy presente, siendo la alfombra roja uno de los escaparates con más relumbrón para diseñadores y firmas de lujo. De hecho, la red carpet de los Oscar podría ser considerada como una pasarela internacional de la talla de la Semana de la Moda de Nueva York, Milán o París.
Este año, el paseíllo por la alfombra roja estuvo marcado por el mal tiempo, lo que provocó que el desfile de estrellas se viera deslucido. Jennifer Lopez, Lupita Nyong’0 o Julianne Moore fueron algunas de las protagonistas para bien o para mal de la velada con sus modelitos , junto a la española Sonia Monroy, que en un fotomontaje, hizo creer a todo el mundo que se había plantado en la ceremonia de los Oscar con un diseño DIY (do it yorself o lo que es lo mismo hecho por ella, que inspirado en la bandera española y que éste había sido el motivo de su expulsión de los Oscar 2015.
Sin embargo, no solo hubo diseños acertados y erróneos, sino también hubo creaciones de lo más frikis como las que lucieron Lady Gaga, Kelly Osbourne o la actriz cubana Blanca Blanco.
Lady Gaga: la cantante no se quiso perder los Oscar 2015 y acudió a la cita mejor vestida de lo que se podría pensar con un diseño blanco de Azzedine Alaïa a juego con unos guantes rojos que parecían los típicos de lavar los platos y que fueron la comidilla durante toda la noche en el ciberespecio.
Kelly Osbourne: otra cantante que dio la nota en la ceremonia de los Oscar. La joven lució una creación de Rita Vinieris con mangas de encaje y con abertura asimétrica que ha sido seleccionado como uno de los peores de la noche en la mayoría de los rankings de las mejor y peor vestidas y que, además, lo incluímos entre los más frikis por su parecido al de la bruja Úrsula de La Sirenita, tal y como se hicieron eco en las redes.
Blanca Blanco: la actriz cubana también llamó la atención de los medios en su desfile por la alfombra roja con un vestido en color rojo y negro con ruffles, que simulaba ser una llama y que parecía sacado de Los Juegos del Hambre.