Arrancamos una nueva semana y con ella dejo atrás muchos sentimientos encontrados, buenos y malos. Pero como siempre hay que quedarse con lo positivo, me aferro a los buenos momentos que viví el pasado domingo con motivo del Día de la Madre. Espero que os gustara el post que dedicamos a los estilismos de las mamis malagueñas. Al hilo de este día, y dado que era especial para mi porque era mi primer día de la mami, decidí hacer algo que no he hecho nunca en mis nueve años de profesión: permitirme la licencia de convertirme en protagonista de una de mis noticias, en este caso la entrada de este blog. ¿El motivo? Porque me parece una buena carta de presentación para que quienes nos seguís (que cada vez sois más y más. Gracias!) sepáis quién está detrás de esta pasarela urbana. Tras esta ventana, que cada día intenta que os asoméis a la moda urbana de nuestra ciudad, se esconde una amante de la moda y la decoración (tengo el corazón dividido yo diría al 50-50%) que trata de cazar en cada sesión los mejores outfits de la calle que, al fin y al cabo, es la que marca tendencia.

A continuación os dejo el look que elegí este domingo para dar un paseo al solecito por las playas de El Palo con Alejandro, desde hace siete meses el rey de mi casa. Como vereis, el collar de calaveras es el protagonista absoluto sobre el que gira un estilismo colorista y alegre que combina varios de los tonos estrella de la primavera (el azul klein y el naranja chillón). Para ir cómoda con Alejandro opté por un bolso plateado pequeño tipo bandolera que compré en Sfera y al que estoy sacando muchísimo partido.

Y como os he dicho que la decoración es otra de mis pasiones, os abro a modo de extra la habitación de mi hijo, que con tantísimo cariño monté hace ahora un año. En este caso reconozco que soy bastante clásica y recurro a los tonos pasteles (¡No salgo del celeste y del beige!). Lo dicho, espero dar muchas ideas a las futuras mamis que esteis preparando el cuarto de vuestros bebés. ¡Ahí va mi aportación al día de la madre!

Os explico: los vaqueros son de Mango, el modelo entubado que en mi caso es con diferencia el que mejor me sienta y con el que me encuentro más cómoda. Las sandalias de multitiras de taconazo son de Zara del año pasado y le estoy sacando muchísmo partido. La camiseta azul klein es de Mango, de esta colección, y me gusta por el tejido super agradable que tiene y por sus jaretas. La chaqueta, de Zara de la temporada de primavera de 2011, es la favorita de mi colección (para mi esta prenda es un básico y tengo debilidad por ellas). Me encanta su tono (llamativo y super favorecedor), la vuelta rosa frambuesa de la manga, sus cremalleras doradas y el botón en azul klein. Pero sin duda, la pieza estrella es el collar de calaveras de colores, de la firma malagueña No me llames muñeca, que me parece ideal para combinar este verano con los colores de moda. las pulseras también son de No me llames muñeca.

Seguimos con la habitación de Alejandro:

En mi caso, cuando monté el cuarto tenía claro que quería muebles prácticos, económicos (con el objetivo de cambiarlos cuando Alejandro crezca y que no me de remordimientos) y de un tono neutro para poder jugar con los textiles y cambiar el aire de la habitación cuando me canse. Con estas premisas y después de ver muchos catálogos carísimos, encontré estos en Ikea, que me parecieron perfectos para la idea que tenía. Los cajones de la cómoda son muy amplios y con las cestitas que también venden en Ikea para organizar el interior en compartimentos la ropita queda super ordenada.

El armario me enamoró por sus puertas de cristal con crucetas de madera blanca, ideales para vestirlas con una tela (en mi caso opté por un piqué en blanco). Encima de la cómoda veis una estantería dividida en seis zonas, también de Ikea, unas cajas de mimbre (de Zara Home, a las que les coloqué unos lazos celestes) y una lámpara de estrellitas azules de Leroy Merlin.

Junto al armario veis un silloncito. Lo compré en una tienda de telas de San Julián que te da la posibilidad de elegir el tejido que más te guste para tapizar, y a un precio estupendo que merece mucho la pena. En la pared veis tres cuadros, los tres hechos a mano. El del nombre de Alejandro a punto de cruz me lo hico mi mami. Los otros dos los diseñé yo: uno lleva la inicial A, que recorté de un cubre toallas de lino de Zara Home, y va combinado con un fondo de tela de piqué celeste que me sobró de las cortinas. El otro es un babero antiguo de mi madre bordado a mano. En cuanto que cayó en mis manos tuve claro que no podía ponérselo al peque. ¡Tenía que enmarcarlo! Y quedó precioso sobre un retal del papel pintado de la habitación, de lunaritos celeste. Decidí montar los tres cuadros con molduras de distintos colores para darle un toque más original. Así que ya veis, es cuestión de echarle imaginación. Podéis buscar trozos de tela o de papeles que vayan con los tonos del cuarto y elegir un marco bonito…¡Y voilá! ¿Os gusta la idea?

La cuna es de Ikea, la ropa de cuna de Zara Home y las letras de caligrafía inglesa que se ven sobre la cuna son de madera hechas por encargo y compradas en la web Arriba en el desván. La lámpara de pantallas de vichy celeste es de Pasito a pasito. Las paredes del cuarto llevan un friso de madera blanca comprado en Aki. Encima del friso, dos de las paredes llevan papel pintado de topitos celeste (de El Corte Inglés), y las otras dos van pintadas en un tono beige topo con objeto de no recargar demasiado el espacio.

Y para terminar este post, el principito de esta habitación, vestido con camisa de vichy rojo y petito blanco y zapatos rojos.

¡Espero que os haya gustado! Y, sobre todo, que os haya dado ideas. Saludos!