Siente debilidad por los jerseys a rayas, -«me gustan desde siempre y tengo muchos»-, adora las gabardinas, -«porque son super ponibles y sofisticadas »- y rara vez la veréis sobre unos taconazos: «Con dos niñas pequeñas de nueve meses y dos años no me queda otra que optar por las manoletinas», confiesa. Eso sí, puesta a ir plana, Laura Olea se decanta por bailarinas tipo joya con alguna aplicación que le de un toque especial. Y es que en lo que a estilismos se refiere, los detalles son fundamentales para esta diseñadora de tocados, fashion victim confesa, para quien la moda es pura diversión. «Me encanta seguir las tendencias e idear combinaciones», recalca desde su cuidado taller, ubicado en calle Strachan.
Allí, rodeada de pamelas, turbantes y sombreros, nos desgrana las claves de su armario: un universo que era «caótico» hasta que intervino su madre. «No sabía ni lo que tenía, así que un día decidí plantarme en su casa y ordenárselo por prendas y colores», bromea. La funcionalidad manda en el vestidor de Olea, donde predominan los vestidos sueltos, los vaqueros -uno de sus básicos de invierno-, y los blazers, «me encantan porque son capaces de transformar cualquier look», dice.
Para sus outfits de día, para ir al taller, Laura suele decantarse por prendas cómodas y versátiles con algún punto chic como el conjunto que elige para la sesión de fotos: un romántico vestido lencero en salmón de Isabel Marant («que lo mismo sirve para una boda con un buen tocado que para ir a trabajar con una chaqueta vaquera»), botas planas y bandolera de Uterqüe. Para la noche, la diseñadora es fiel al negro, que combina con acabados metalizados. «Soy bastante discreta, odio los excesos, pero siempre intento romper la sobriedad con un complemento que destaque (como los collares y broches de aires vintage que suele comprar a Anton Heunis en Paris) o alguna prenda de diseño como la chaqueta de destellos cobre de ba&sh para Chavala que exhibe en las fotos combinada con blusón de Zara, leggins, cinturón de Masscob y tacones dorados de Massimo Dutti.
¿Su apuesta para un evento? Olea -que llevó su colección a Cibeles de la mano de Juana Martín en 2009 y 2010- propone un vestido corto de Hoss en gris perla para que el tocado verde esmeralda luzca con todo su esplendor. «Un tocado es la guinda del pastel de cualquier look. Siempre resulta definitivo y perfecto».
Os dejo con ella y con las maravillosas fotos de mi compañera Patricia Merchán. Espero que os guste su armario tanto como a mi!
LOOK DE DÍA: VESTIDO LENCERO + CHAQUETA DENIM +BOTAS PLANAS
Para ir a trabajar, Laura elige prendas sueltas que le permitan ir cómoda y a la vez arreglada con un punto de sofisticación. Me encanta el vestido lencero que centra su propuesta, de Isabel Marant. Tiene un tono salmón apagado super romántico y un bordado de flores delicado que me parece precioso. La versatilidad es otra de sus bazas. Y es que, como destaca Laura, la clave está en el maridaje. “Puesto con un tocado queda genial para cualquier evento pero si se lleva con una chaqueta vaquera se le resta formalidad y vale para un outfit de día”, destaca la diseñadora, que apuesta por esta segunda opción y lo combina con chaqueta denim de Sisley, botas planas de piel de Uterqüe, “que las tengo gastadas de tanto ponérmelas”, y bandolera de la misma firma con maxi cierre dorado. Con esta mezcla logra un perfecto estilismo para ir a la oficina con aires boho chic. “Los vestidos son imprescindibles en mi armario, tanto en verano como en invierno combinados con leggins y botas o manoletinas”, señala.
LOOK DE NOCHE: BLUSÓN NEGRO CON CINTURÓN JOYA +LEGGINS +CHAQUETA CON DESTELLOS COBRE Y TACONES DORADOS
Para ir a cenar una noche, la diseñadora se decanta por un sobrio total look negro donde los protagonistas son los complementos, de acabados metalizados. El conjunto se compone de blusón negro de Zara (que aunque es simple tiene un corte muy favorecedor), leggins de Pull&Bear que imitan el acabado del cuero, cinturón joya de cuerdas trenzadas con maxi eslabón dorado de Masscob (adquirido en Chavala) y tacones dorados de Massimo Dutti. Para abrigarse ahora que comienza a hacer humedad por las noches, Laura propone una chaqueta de pelo con destellos cobre de la firma ba&sh que a mi juicio es la pieza clave de este outfit, por su originalidad, su diseño y por la sofisticación y elegancia que imprime. “Para arreglarme de noche suelo ser discreta, aunque me gusta llevar algún cinturón o un zapato de brillo que me de algún toque especial”, dice al tiempo que confiesa que odia los excesos: “Si me pongo, por ejemplo, un collar o un anillo llamativo prescindo de otros complementos porque, como decía Coco Chanel, “seguramente lo último que te pongas sobra”, apostilla.
LOS BÁSICOS DE SU ARMARIO
En el armario de esta malagueña, con tienda propia en Málaga y Córdoba y un proyecto de tercera apertura en cartera, (“que posiblemente sea Granada, para continuar mi expansión por Andalucía a comienzos del próximo año”, nos adelanta) no faltan los jerseys a rayas -por los que dice sentir una incomprensible debilidad desde hace muchos años, “tengo miles y no se por qué”, bromea- y las gabardinas, para Laura una prenda básica en sus looks por su versatilidad, “me encantan porque lo mismo me las coloco para ir al gimnasio con unos vaqueros que para ir más arreglada una noche”, asevera. La de la foto, la clásica en color camel, es de Massimo Dutti y la combina con jersey a rayas, gafas Ray-ban y un precioso bolso negro con cierre trenzado plateado y borlón de MO by Maria Roca. Los blazers son otros de sus imprescindibles por la fuerza que tienen para transformar cualquier estilismo básico y darle un sello de elegancia. El que lleva en la foto es de Zara, en azul marino con los puños vueltos. Y un cuarto básico: los maxi bolsos para llevar el sinfín de trastos que arrastran sus dos hijas pequeñas. En la imagen superior posa sonriente con el que le lleva acompañando durante los últimos tres años, un Marc Jacobs en un tono topo super ponible que va con todo, lo que le convierte en una inversión super fácil de amortizar.
PARA UN EVENTO ESPECIAL: VESTIDO GRIS PERLA DE HOSS + TACONES TOPO + TOCADO EN AGUA MARINA
Para ir a una boda, Laura se decanta por un vestido de media pierna en gris perla de Hoss, de tejido vaporoso y con escote cuajado de pedrería. Lo combina con tacones en tono topo y acabado acharolado de Nicolás. La diseñadora elige colores neutros en ambos casos con un objetivo claro: que el protagonista y el centro de todas las miradas sea el tocado, hecho en su taller en un bonito agua marina y también con pedrería. Puesto con el bolso en el mismo tono se convierte en el toque estrella que logra rematar un outfit a mi juicio elegantísimo, armonioso y super estiloso.
SUS COMPLEMENTOS: COLLARES Y BROCHES PARISINO Y BOLSOS DE CORTE RETRO
A la hora de comprar complementos, a Laura le pierde una pequeña tienda parisina que se ha convertido en una de sus paradas obligatorias cuando va a la ciudad de la torre Eiffel. Se trata del taller de un diseñador local llamado Anton Heunis cuyas piezas vintage (las que aparecen sobbre el maniquí) han conquistado a Olea. En materia de bolsos, la diseñadora siente debilidad por los diseños de Uterqüe, de donde son la mayoría de su colección en la que dominan los aires retro.
LOS ZAPATOS PLANOS Y LAS MANOLETINAS JOYA, SU DEBILIDAD
En lo que a calzado se refiere, Laura es de las que prioriza la comodidad y se decanta por ir plana. Su altura se lo permite, así que en su armario predominan las manoletinas joya, con incrustaciones de pedrería, tachuelas o algún acabado llamativo que las haga especiales, como el verde metalizado que colorea el modelo de Bimba y Lola con el que posa ante la cámara de Patricia Merchán, nuestra fotógrafa. “Tacones creo que solo tengo dos pares y los reservo para ocasiones contadas”, detalla. Los pares que aparecen sobre la butaca en la foto de arriba son (de izda a derecha y de arriba a abajo) de una tienda de Tarifa, de Zara, de Bimba y Lola y de Massimo Dutti.
Bueno, y para terminar os dejo una foto mia con Laura en su taller de calle Strachan número 4, un piso decorado con un gusto exquisito que no podéis dejar de visitar si tenéis una boda y queréis brillar con un tocado. Laura os asesorará y dará con el que mejor le vaya a vuestro vestido para que vayáis perfectas (la próxima semana colgaré un post con una selección de diez modelos espectaculares, ¡estad atentas!). En la foto, Laura lleva una camisa blanca monísima con tira vertical de encajes en el frontal y jeans entubados de Zara (un claro ejemplo de lo que siempre os digo, que se puede ir estupenda con prendas de fondo de armario buscando algunas que tengan algún detalle diferente, en este caso el encaje de la blusa). En mi caso, llevo jersey sin mangas negro de Zara, falda de Zara (llevo años con ella!!), cinurón de Sfera, zapatos vintaje en rojo comprados en una tienda de segunda mano y maxi collar también vintage de pedrería del rastro de Fuengirola. Durante la entrevista no pude evitar preguntarle a Laura por su experiencia en Cibeles, donde desfiló sus tocados en los años 2009 y 2010 acompañando a la colección de la diseñadora cordobesa Juana Martín. “Fue algo increíble que resolvimos en apenas diez días. Juana me lo propuso y en tres días nos tuvimos que poner como locas a hacer todos los tocados para mandarlos a Madrid. Pero mereció la pena. Cuando los vi salir a pasarela me puse a llorar como una tonta”. Tanto le gustó aquello que ya sueña con repetir. Y quién sabe, ahora que trabaja con Alma Aguilar sería el momento!
LAS CINCO PARADAS IMPRESCINDIBLES DE SU RUTA DE TIENDAS
1. Uterqüe. «Me encanta para bolsos y zapatos . Diseño a buen precio».
2. Zara. El buque insignia de Inditex es imprescindible en su shopping.
3. Chavala. Olea recurre a la tienda multimarca para los eventos especiales.
4. Nice things. Prendas originales para ir vestida a juego con sus hijas.
5. Bimba y Lola. «Es el único sitio donde encuentro tacones medios».