En Málaga ya huele a cine. A festival. A fiesta. A alfombra roja y, por ende, también a moda. Y es que la XIX edición del Festival de Málaga está ya a la vuelta de la esquina. La cita, que calienta motores, arrancará el próximo 22 de abril pero ayer dio su peculiar pistoletazo de salida con su puesta de largo oficial en Madrid. El ‘photocall’ estrenó ubicación: la Academia de Cine, cuyo gran auditorio se llenó anoche de periodistas y cineastas para escuchar a los responsables de 14 de las 16 películas seleccionadas a la sección oficial. Y, una vez más, los estilismos también fueron protagonistas.Eso sí, como es ya un clásico en esta cita previa, los actores y directores optaron por looks más relajados y desenfadados. Sin grandes alardes. Sin muchas excentricidades. Sin salirse de guión. Sin apenas riesgos. Así pues, la alfombra volvió a ser algo insulsa, plana, con ‘outfits’ muy de andar por casa. Pero hubo excepciones.
Juana Acosta fue de las más guapas de la noche. La colombiana puede presumir de habernos regalado algunos de los looks más impecables de los que han desfilado a las puertas del Teatro Cervantes. Y ayer tampoco defraudó. Eso sí, para la ocasión eligió un ‘outfit’ más informal de lo que nos tiene acostumbrados. Un conjunto de chaqueta torera y pantalón culotte (tendencia clave de esta primavera) de print geométrico que acompañó de top negro y sandalias de tiras en el mismo tono. Las mismas -o casi- por cierto que las que lució la actriz Ingrid García, quien desfiló por la alfombra acompañando a la directora Helena Taberna con ‘Acantilado’ y al equipo de ‘Gernika’, una de las grandes producciones de la presente edición. García fue otra de las actrices que recurrió a un dos piezas. En su caso, un conjunto muy veraniego (a mi juicio, quizás excesivo ya que el blanco es un color que entraña grandes riesgos cuando una no está lo suficientemente bronceada) compuesto por crop top rematado en ondas y shorts a juego. Completó el estilismo con unas sandalias primas hermanas a las de Acosta y una chaqueta negra por los hombros (el bicolor vuelve a triunfar esta temporada).
Y hablando de bicolor, el negro -que siempre es apuesta segura- también estuvo muy presente en la primera alfombra del festival. La que mejor lo defendió fue Carolina Bang -otra de las habituales a esta cita- que lució un elegante vestido midi con mangas de encaje para acompañar a su marido Álex de la Iglesia y a la troupe de ‘El Bar’. Sofisticado y, lo más importante, favorecedor. La nota de color la pusieron sus sandalias frambuesa, ideales para romper la sobriedad del negro.