Desde mediados de año Spotify digamos que tiene acceso restringido. Obviamente, los defensores del todo gratis dicen eso de ‘Spotify es de pago’, pero sólo es que permite acceso a la música sin suscripción de pago con limitaciones: 10 horas mensuales por cuenta, además de un límite de 5 reproducciones para cada tema musical, y cientos de anuncios que interrumpen las canciones. Esa son las llamadas ‘cuentas Open’ o gratis.
La idea es que te pases al ‘Spotify Premium’ o ‘Spotify Unlimited’. Algo que ha hecho rebelarse a buena parte los usuarios que hasta ahora disfrutaban de la versión gratuita.
Opciones gratuitas
Tras el cambio de política de Spotify los usuarios buscan programas gratuitos, que ofrecen exactamente lo mismo, ya sea a través de una aplicación, o de una sencilla página web. Te destacamas:
Uno de los indiscutibles líderes desde 2007. Disponible también en un portal. No necesitas registro, además de la posibilidad de compartir listas de reproducción. Además, cuenta con aplicaciones hechas por usuarios, para poder descargar sus archivos, y sin publicidad entre canciones.
Last.fm es una red social musical en la que los usuarios pueden compartir sus gustos musicales con sus contactos. La escuchas a través de programas instalados en en el ordenador, incluso el propio reproductor de Windows o Spotify. Los que usen el navegador de Google Chrome, tienen la oportunidad de escuchar lo que tienen almacenado en su Last.fm, de forma completa a través de una extensión, que solo es compatible con dicha aplicación. Así, pueden escuchar las listas que tienen almacenadas en el servicio, las de sus amigos, o las que proponga el sitio.
Millares de canciones gratis. Considero que es el Youtube de la música. No puedes crear listas de reproducción, pero sí encontrarás casi cualquier canción que busques, la podrás descargar, compartir en redes sociales -funciona perfectamente con Facebook– y usar un código incrustado para llevarlo a donde tú quieras.
A través de página web. Mezcla de iTunes y Spotify, y ofrece: buscador de canciones y discos y la posibilidad de crear listas de reproducción. La particularidad de Musicuo es que su base de datos la alimentan sus usuarios, lo que significa que son estos los que suben canciones al servicio.
Todavía en beta y de momento sólo puede descargarse por invitación. En su web se anuncian muchas de sus futuras funciones, entre las que destaca la posibilidad de poder compartir lo que se escuche en el sitio a través de redes sociales.