Muy buenos días, amigos de la meteo. Hoy toca leer a mi amigo Cristóbal Gambero, aficionado a la meteorología y gran fotógrafo que os contará este suceso que paso hace 137 años en Mijas Pueblo un domingo 2 de noviembre del 1884. Pero antes de dejaros con Cristóbal, os comento que ayer Málaga Aeropuerto registro una temperatura máxima de 29.6 grados.
Mañana por la tarde os pondré los acumulados más importantes de precipitación en la provincia de Málaga.
Os dejo con Cristóbal. Toca leer.
Recuerdo de niño, que en aquellos días lluviosos de invierno, me gustaba estar con mi abuela María pegado a la ventana viendo llover y llover, la verdad es que a mi abuela no le hacia mucha gracia cuando llovía muy fuerte y sobre todo cuando se iba la luz, le entraba pánico. Yo encantado, mientras más llovía mejor, cosas de niños, (y ahora también de mayor), pero yo le decía a ella:¿ por que tienes miedo? y ella me contó esta historia basada en hechos reales, que si bien ella no presenció ya que nació en el 1929, se lo había contado su abuela que la vivió en realidad.
Me contaba que la mañana del 2 de Noviembre de 1884, día de difuntos, de repente el cielo se puso muy negro, se hizo de noche, y empezó a llover con tal fuerza que creía que se acababa el mundo. Cayo tanta agua que Mijas quedó muy afectada con aquella riada, la sierra se les vino literalmente encima.
En aquellas fechas de la riada, la Sierra de Mijas no tenía ni un solo árbol, los cortaron todos para llevárselos a Málaga para utilizar la madera como combustible, ya empezaba el fenómeno de la industrialización. Que error más grande este, las piedras y el lodo al no encontrarse obstáculos en las fuertes pendientes que dan al pueblo, rodaban como pedro por su casa. Destruyeron muchísimas casas , llevándose la vida de muchas personas.
Me decía también mi abuela que aparecieron criaturas muertas y “vivas” en las playas de Fuengirola a 7 u 8 kilómetros de aquí, mi abuela a aquellos hechos les llamaba “El Dilúbio o Riá, para mi este relato me marcó mucho, siempre me acostaba pensando lo que había pasado y más de una vez me entró ganas de haber estado allí en aquella fecha para haber hecho fotos y contabilizar los litros que cayeron.
Para hacerse una idea de aquella Mijas del siglo XIX , pongo una foto de la época:
A continuación me sirvo del libro HISTORIA DE MIJAS de don Rafael Medina antiguo párroco de la Localidad, que mediante relatos de personas mayores y algún que otro documento antiguo hizo este fabuloso capitulo sobre la Riá, con mucho más detalle de una de las tragedias, sino la más grande que ha ocurrido en el pueblo de Mijas.
Una de las tragedias más grandes que han ocurrido en Mijas fue la famosa riada. Eran las diez de la mañana del día 2 de Noviembre de 1884, cuando la gente estaba en la parroquia, oyendo las tres Misas de Difuntos, según la liturgia antigua se solían celebrar. El cielo tomó un color de plomo y una catarata de agua empezó a caer, destruyendo casi la totalidad de las casas y muriendo arrastradas por las aguas, animales y sobre todo, gran número de personas que la mayoría fueron al mar.
Algunas de las victimas fueron: Francisco Millan Gomez, de once años de edad, Inés Pérez Jiménez, de cincuenta y tres años, Lazaro Villegas………….(LA LISTA ES MÁS LARGA, OMITO LOS NOMBRES PARA ABREBIAR) , …..según el Registro Civil.
Podemos darnos cuenta de la tragedia por la lápida que está en la esquina de la calle Carril que se une con la calle del Pilar, está a unos 7 metros de altura y dice. “Hasta aquí llegó el agua de la riada el día 2-11-1884.”
La fuente que hay en la plaza de la constitución fue construida, por el marmolista Galiano, con las piedras que arrastró el agua de la riada, tal y como indica la inscripción de dicha fuente.
Muchos pueblos y párrocos se volcaron para ayudar a la tragedia de los mijeños. Los pueblos de Ronda, Cártama, Valle de Abdalajiz, Torrox, Coin, Tolox, Montejaque, Antequera, etc.. el total recaudado fue de 1949 pesetas. En Mijas se constituyó una junta de beneficencia, D. Joaquin Gonzales, Señor cura, D. Juan Jiménez…….etc
Según el acta del Ayuntamiento dice: “En la Villa de Mijas, a primeros de febrero de 1885, reunidos en la Casa Capitular, la Junta de Beneficencia para la distribución de socorros y cuyos individuos se expresan arriba, bajo la presencia del Sr. Alcalde, D. Joaquin Gonzales y Gonzales, manifestó el Reverendo Párroco D. Juan Jimenes Baños, que el muy Excmo, e Istmo, Sr. Obispo de esta Diócesis, le había remitido por conducto del Sr. Cura de Comares, D. José Jiménez Gamberos, la suma de 486,5 pesetas, o se a 1946 reales, en favor de las desgracias de la inundación, que tuvo lugar en la mañana del día 2 de noviembre último; la junta llena del mayor entusiasmo hacia su Prelado, principio por darle un millón de gracias por el acto benéfico que acababa de hacer para remediar, en parte, sus perdidas; y no encuentra otra recompensa de agradecimiento mayor, que el consignar en la presente acta, su adhesión de respecto, cariño y gratitud eterna, no sólo el de esta Junta, sino el de los demás habitantes en general; y al efecto, sáquese copia certificada de este acto uniéndose los recibos originales de las personas socorridas con el Vº , Bº . del Sr. Alcalde, Presidente, para que por el Sr. Cura Juan Jiménez Baños, llegue a manos de S.E.I
En este momento y con la anticipación debida de aviso, se dio principio a la distribución de socorros según las estadísticas..
Dan el Vº . Bº. el Obispo y el Alcalde, el 26 de Febrero de 1885. según el Archivo del Obispado.
También del citado libro de D. Rafael Medina, he rescatado, en el apartado dedicado a calles singulares, el siguiente dato:
Calle del Porro, es una boca-calle de C/ Agua en el Barrio Santana, antes su nombre era Callejón del Tajo. Se le puso Calle del Porro en honor de un minero, que vivía en dicha calle, llamado Juan Criado Tovar, cuya fortaleza para dominar un porro era grandísima y de ahí su apodo “El Porro”. Este señor, trabajó denodadamente en la inundación, del 2-11-1884, salvando varias vidas, rompiendo piedras muy grandes con su porro, que atrapaban muchas casas. El Ayuntamiento le dedicó una calle con el nombre “Porro”, al no querer él que le pusieran su nombre de pila.
Por ultimo buscando en el Diccionario Popular Malagueño encontré esto: La gente de Mijas, sobre todo los viejos, cuando este pueblo, ahora tan famoso, sólo era un pequeño nido blanco acurrucado entre los ásperos pinares de la sierra, recuerdan la extraordinaria suerte que tuvo la “Niña de la riá”, porque no fue poca, sino extraordinaria, la de rodar arrebatada por las aviesas aguas del diluvio y la tronada desde los altos riscos mijeños hasta la misma playa de Fuengirola. ¡Cinco kilómetros, Señor, dando tumbos y salir ilesa! No me negarán ustedes que el caso es más que justificado de exvoto colgado en la pared de la ermita. También, como recuerdo, quedó en el lenguaje popular aquello de “¡Anda, que tienes más suerte que la niña de la riá”.
Juan Cepas
Diccionario Popular Malagueño
Sin ser un experto en la materia y como simple persona que le gusta y le inquieta los temas de historia y meteorología he querido adéntrame en el tiempo para hacer una leve descripción de lo que pudo pasar ese 2 de Noviembre de 1884, ni yo estaba allí, ni entonces había nadie que recogiera datos meteorológicos, tampoco hay fotografías de la catástrofe, pero la verdad es que la tromba de agua que debió de caer en Mijas en esa fecha debió de ser brutal. Si a esto añadimos que la sierra estaba deforestada, como dije anteriormente, sin duda la tragedia se planeaba en las cabezas de los mijeños de aquella época.
Primeramente pienso que fue una vaguada lo que afecto a Mijas Pueblo ese día, como podéis ver en esta mapa a 500 hpa elaborado para ese año.
Aquí podemos observar las principales cañadas que dan al pueblo y que ayudaron, con sus enormes pendientes, a que el agua y las piedras entraran de lleno , incluso en el centro del pueblo.
Una situación parecida se me vino a la cabeza: En Julio de 2001 cuando un gran incendio arrasó la cara sur de la Sierra de Mijas, la que da al pueblo, y otra vez nos dejo vendidos, temía que las lluvias otoñales, a la vuelta de la esquina, podrían ocasionar de “ser fuertes” una tragedia similar a la de 1884. Creo que tanto las autoridades locales como regionales se dieron cuenta de inmediato de este problema por venir, afortunadamente las lluvias de ese otoño no fueron torrenciales, y la Junta de Andalucía, construyó diques, en prácticamente todas las cañadas que dan al pueblo. Y lo más importante: La reforestación de la Sierra de Mijas, con la plantación de 12.500 árboles en el entorno de la Ermita de El Calvario, en una zona devastada por el gran incendio forestal de 2001. A estos 12.500 árboles habrá que sumar los 17.500 previstos en la zona de la Cantera del Barrio y Las Muñequeras, con lo que se elevará el número de árboles a plantar en la Sierra de Mijas a 30.000.
Traigo dos extraordinarios documentos como son los recortes de prensa de la época, narrando la catástrofe en sus paginas. Estos documentos estuvieron expuestos hace aproximadamente un año en la sala del Archivo Histórico de Mijas-Pueblo, luego el periódico local Mijas Semanal, publicó dichos documentos, podéis descargarlos en pdf en la siguiente dirección: http://www.mijascomunicacion.org/index.php/mijas-semanal/category/edicion-2012
Espero que os haya gustado.
Muchas gracias Cristóbal por este relato. Un fuerte abrazo.