Hola!, últimamente está cada vez más de moda pintarse las uñas de maneras originales. Sobre todo se lleva ponerse un pequeño adorno sobre el esmalte. Pero también podemos personalizar nuestras uñas mezclando sólo dos colores.
Hoy os propongo una manera bastante fácil de pintar nuestras uñas y que a la vez resulta bastante vistoso. Tras preparar la uña con una base vitaminada, colocamos unas guías que haga como un pequeño triángulo en la parte superior de ésta. Pintamos toda la uña excepto este pequeño triángulo y dejamos secar. Podemos utilizar el color que más nos guste. Yo aposté por el tono 288 de Kiko.
A continuación, Aplicamos el esmalte (aconsejo un tono plateado) sobre el pequeño triángulo y dejamos secar.
A continuación, retiramos las guías y ¡Voilá!. El resultado es un moderno diseño sin ser demasiado llamativo.